domingo, 28 de octubre de 2012

Mesilla restaurada


Hace algunos meses en un viaje a Alcalá de Henares, ciudad que está muy próxima
 de donde vivo, encontré junto a un contenedor una mesilla.
 Hacía tiempo que quería conseguir una como esta e incluso estaba decidida a comprarla,
 pues bien ese día tuve mucha suerte y encontré, no una, sino dos mesillas. En una misma tarde
 en calles distintas dos mesillas, no son iguales, pero si del estilo que yo quería.



Imagen 0
Esta es la mesita, me pareció un mueble precioso y además es de madera, madera, pero....

. como se puede ver le faltaba una pata.
Busqué por los alrededores por si se hubiese caído, pero no encontré nada. Aún así la cogí y
 lleve en brazos como a un bebé por medio Alcalá y os aseguro que pesaba una tonelada, 
porque además llevaba un cristal bastante grueso.
Cuando llegué al coche ya no sentía los brazos y aún me quedaba lo peor, meterla bueno
 meterlas en el maletero del coche, pues ya he dicho que fueron dos las que encontré, como 
no cabían tuve que desmontarles las patas y algún adorno.

Tenía muy claro como quería hacerla, muy sencilla quitarle todo el barniz restaurarle los

 pequeños defectos que encontrara y darle una terminación a la cera.
Lo primero y más necesario era fabricarle una pata nueva, ya que había visitado todos
 los establecimientos donde hubiera posibilidad de encontrar algo parecido pero no tuve suerte.

Cuando estuve segura que la única forma de conseguir la prótesis para mi mueble era fabricarlo

 yo misma me decidí a hacerlo, ¿Pero como?, no tenía ni ídea, nunca había hecho algo parecido
, pero claro, yo no soy una experta ni tengo las herramientas adecuadas. Pero como no iba a
 darme por vencida eche mano de mi mejor herramienta "La paciencia" y me dispuse a
 conseguir mi propósito.
Compré un madero de 7X7  y dibujé cara a cara la pata, todas las caras son diferentes con
 entradas y salidas hechas sobre las diagonales del listón.




Imagen 2



Aquí está la pata a copiar y el listón.
Intenté cortar con la sierra de calar, pero era imposible, no podía. después de intentarlo de todos

 modos, corté el listón a la medida de la pata y con mi segunda mejor herramienta un cuter empe
cé a comer la madera para lograr hacerle  las curvas



Imagen 3



Imagen 4



Para que no todofuera  fácil , a la dichosa pata le salieron unos nudos duros que parecían

 verdaderos callos y que me dolió quitarlos más que si los hubiera tenido .en un pié. No tenía
 más remedio que quitarlos ya que estaban en la parte más estrecha de la patita, para lograrlo
 probé, con una lima, una hoja de sierra, una dremell, la lijadora y no se con cuantas cosas mas y
 sólo quitando láminas muy finas con mi cuter pude rebajarlo hasta un nivel poco más o menos
 adecuado.



Imagen 5
con la dremell



Imagen 6
otra variedad



Imagen 7
con una hoja de sierra



Imagen 8
Después de muchos días y mucho trabajo conseguí algo parecido a lo que quería



Imagen 9
Cuando llegué a este punto, aunque aún no era exacta, me parecía increible haber podido

 hacer algo así y me sentí muy contenta y orgullosa de mí misma.



Imagen 10
con su modelo a falta de pequeños retoques




Imagen 11
Ya no está cojita.
Ahora a restaurar el mueble. Lo primero lijar completamente para quitar todo el barniz y ver el

 estado real de la mesita, luego proteger de posibles inquilinos, estaba sana pero aún así le dí
 tres manos de protector , teñí la pata del color de la madera y por último cera en abundancia
 para todo el mueble todo ello con sus correspondientes manos de lijadas con lana de acero.




Imagen 13



Ya terminada, a mi me parece preciosa.


viernes, 12 de octubre de 2012

Reciclando, reciclando...II

Cartones, papeles, retales de tela que hay por casa y las ganas de hacer cosas nuevas, son los ingredientes necesarios para hacer algunos objetos útiles.
el primero de ellos es un portacartas, su utilidad tener las cartas recogidas hasta el momento de archivarlas.

está realizado con el cartón reciclado de  una caja de galletas y forrado con papel de regalo y fotocopias
                                     

Una vez que aprendí, más o menos, a hacer estos objetos sencillos, decidí hacer algo más complicado como un servilletero.
El primero , como era para probar lo hice con cartón reciclado y telas que tenía por casa..No me pareció muy difícil y aún con muchos fallos me gustó
A este prototipo le han seguido otros , pero esta vez lo que he reciclado ha sido la trasera de un armario que encontramos al lado de un contenedor este verano. El material es un aglomerado de papel parecido al contrachapado que se puede cortar con un cuter y es muy fácil de trabajar.
Como ya tenía los patrones del servilletero, hice otro parecido pero más grande ,para que cupieran las servilletas de todos los tamaños.


El proceso es igual al de cartón, la estructura es de "madera" y el forro va pegado en cartulina fina.
Lo forré con dos telas coordinadas de flores y pistacho, para que la tapa tuviera mejor caída le puse una flor de pasta parecida a las de la tela.
Naturalmente tuve otras peticiones que estoy encantada de atender.
Este es el modelo en el que estoy trabajando ahora, pero seguiré experimentando.

jueves, 11 de octubre de 2012

Reciclando, reciclando.....

Hace tiempo, cotilleando por las páginas de internet, encontré a unas chicas que hacían cartonaje.
 Conocía la palabra pero no la actividad, quedé interesada y decidí que intentaría aprender. Por unas cosas u otras lo fui dejando hasta que hace unos días visitando el blog de mi amiga Mer http://losenreosdemer.blogspot.com.es   y el de sus amigas como me entró el gusanillo de aprender a trabajar con el cartón.
Gracias Mer y por favor transmite mi agradecimiento a tus amigas

En todas las casa hay cajas que en algún momento fueron el embalaje de productos y que por cualquier motivo no hemos tirado. En la mía, hay montones que guardo para llevar a reciclar al contenedor.
Busqué una que tuviera un cartón liso, unos retales de tela, pegamento, tijeras y una regla. así armada con todo el instrumental me preparé para hacer mi primer ensayo de cartonaje.
Empecé con una cosa sencillita, o eso creía.
Mi primer trabajo , una cajita para guardar el chupete. está forrada con tela infantil y el nombre del niño con letras de goma eva pegadas
Aquí está abierta. No quedó muy bien pero no me importó, era un experimento que me gustó mucho hacer y que ha hecho que me enganche a repetir este tipo de objetos.
La siguiente cajita fue para mi recién nacida sobrina Teresa ,esta vez quedó más bonita y a su madre creo que le gustó.